Podría haberme dejado vencer por el dolor, la enfermedad, la pérdida, las múltiples desgracias, las obligaciones, el fracaso en diversos aspectos, el hecho de que hayáis dejado de hacerme caso y tantísimas otras cosas, pero sigo en pie.
Acabo de sacar LAS GRIETAS DE LA VIDA, CRISTALES ENSANGRENTADOS se halla en preventa, estoy preparando NIEBLAS DE PERDICIÓN para el año que viene y dentro de poco retomaré la elaboración de ilustraciones. Eso sin mencionar todo lo que os he ofrecido previamente a lo largo de los años.
Aunque soy consciente de que mis personajes no son los estandarizados, las narrativas y estéticas que utilizo no son las más habituales y me distancio de lo que se suele esperar, precisamente ahí está la riqueza de lo que hago. A estas alturas, la mayoría de los autores suelen haber reducido al mínimo la diferenciación real, adaptándose cada vez más a lo que se espera que hagan. Me gusta explorar situaciones e individuos distintos, evitando lo previsible, con buen ritmo y estilos poco habituales, sin recurrir siempre a los mismos esquemas, alejándome de mí sin olvidar quién soy y sumergiéndome en la amplia y demencial peculiaridad individual que existe ahí fuera, regándolo todo con imaginación.
En mi caso, la creatividad es una necesidad. Si no es viable continuar de un modo, será de otro; intentaré seguir elaborando historias e imágenes mediante los medios que considere convenientes en cada momento, de forma personal y auténtica.
Nunca se sabe… Quizá debería parar y dedicar un tiempo a plantearme ser complaciente, utilizar protagonistas con los que sea fácil identificarse y generar creaciones más amables en el futuro.
Espero que algún día os animéis a acercaros a mis obras.