15 marzo 2020

Autorretrato con EL RITMO ASESINO


Roberto del Álamo, agente del Centro Nacional de Control de Riesgos Inmediatos, tiene un caso entre manos. Nadie acaba de dar crédito al curioso planteamiento que defiende, pero él sabe que algo grave está sucediendo. En su opinión, la reciente ola de suicidios oculta una actividad criminal que puede representar un peligro de enorme magnitud si se expande. Ante la falta de apoyo por parte del CNCRI, muchos procesarían la información rápidamente, se olvidarían del tema y volverían a sus vidas; pero él tiene un problema con la finalización, no puede dejar nada a medias.

La década de los noventa está terminando, y la juventud de Simalarga se encuentra totalmente cautivada por la música y las drogas. La noche desata toda su potencia en el corazón de los que deambulan por ella. Es el momento perfecto para manipular las mentes de los jóvenes ocultando mensajes dentro de los sonidos que mueven sus emociones. ¿Y si en algún momento se ha difundido un ritmo casi inaudible, una interferencia subliminal que influye mortalmente en aquellos que la escuchan?

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